El asteroide 951 Gaspra fotografiado por la nave Galileo en 1991Como los asteroides giran alrededor del Sol en órbitas elípticas, la gravedad del gigante Júpiter y encuentros ocasionales con Marte o con otro asteroide cambian sus órbitas, sacándolos del Cinturón Principal y lanzándolos al espacio a través de las órbitas de los planetas. Por ejemplo, Deimos y Fobos pueden ser asteroides capturados. Los científicos piensan que asteroides extraviados o fragmentos de asteroides han impactado en la Tierra en el pasado, jugando un papel importante, tanto alterando la historia geólogica de nuestro planeta, cómo en la evolución de la vida en él. La extinción de los dinosaurios hace 65 millones de años se ha relacionado con un impacto devastador cerca de la península del Yucatán en México. Los asteroides fueron observados por primera vez con telescopios a principios de 1800, y en 1802, el astrónomo William Herschel utilizó por primera vez la palabra asteroide, que significa "como una estrella" en griego, para describir estos objetos celestes. La mayoría de lo que hemos aprendido acerca de los asteroides en los últimos 200 años se ha derivado de las observaciones con telescopios. Los telescopios terrestres se usan para vigilar asteroides que orbitan cerca de la Tierra , no sólo para detectar nuevos o hacer seguimiento de ellos, sino además para vigilar cualquier asteroide que podría colisionar con la Tierra en el futuro. Los científicos definen como asteroides cercanos a la Tierra (Near Earth Asteroids, o NEAs) a aquellos cuyas órbitas nunca los llevan más lejos de 195 millones de kilómetros respecto al Sol. En las últimas décadas, los astrónomos han utilizado instrumentos llamados espectroscopios para determinar la composición química y mineral de los asteroides analizando la luz reflejada hacia fuera de sus superficies. Los científicos también examinan meteoritos -los restos de cometas o asteroides que se pueden encontrar en la Tierra - en busca de claves sobre el origen de estos cuerpos. Aproximadamente las tres cuartas partes de los asteroides son extremadamente oscuros y son similares a los meteoritos ricos en carbono llamados Condritas carbonáceas (tipo C). Cerca de un sexto de los asteroides son rojizos, cuerpos ferrosos (tipo S). En 1997, los instrumentos en el Telescopio Espacial Hubble cartografiaron Vesta, uno de los mayores asteroides, y encontraron un cráter enorme formado hace unos mil millones de años. Es interesante que siendo Vesta de un tipo poco común de asteroide se hayan encontrado en la Tierra meteoritos con la misma composición. ¿Podrían ser éstos restos de la colisión que creó el cráter gigante de Vesta? La nave Galileo de la NASA fue la primera en observar un asteroide de cerca, sobrevolando los asteroides del cinturón principal Gaspra e Ida en 1991 y 1993, respectivamente. Gaspra e Ida se mostraron como objetos de perfil irregular, casi como patatas, marcados con cráteres y fracturas, de 19 y 52 km de longitud respectivamente. Galileo también descubrió que Ida tenía su propia luna, Dactyl, un diminuto cuerpo en órbita alrededor del asteroide que podía ser un fragmento procedente de una colisión pasada. La misión "Cita con un Asteroide Cercano a la Tierra" (Near-Earth Asteroid Rendezvous, NEAR) fue la primera misión científica dedicada a un asteroide. La nave Shoemaker de NEAR alcanzó al asteroide Eros en febrero del 2000 y lo orbitó durante un año estudiando su superficie, órbita, masa, composición y campo magnético. En febrero de 2001, los controladores de la misión guiaron la nave hacia el primer aterrizaje en un asteroide. Lunas Así como el astrónomo del siglo XVII Galileo Galilei fue el primero en ver lunas alrededor de otro planeta, la nave del siglo XX nombrada en su honor fue la primera en descubrir una luna orbitando un asteroide.
Ida y su luna DactylLa mayoría de los científicos había imaginado a los asteroides como montañas aisladas o pilas de rocas tambaleándose solitarias por el espacio. Pero entonces la nave de la NASA Galileo, en su ruta hacia Júpiter en 1993, voló al lado del asteroide de 19 millas llamado Ida y descubrió que tenía su propia pequeña luna. Sólo de una milla de longitud, la luna se denominó Dactyl. Ida y Dactyl fueron el primer asteroide "binario" (o doble) descrito. Fue seis años después cuando se descubrió otro sistema asteroide-luna, pero a esto siguió una pequeña avalancha de descubrimientos:
En 1999, utilizando telescopios terrestres, los astrónomos encontraron que le asteroide Eugenia, de 135 millas de ancho, tenía una luna de 8 millas de diámetro, a la que llamaron Petit-Prince.
En el 2000, se descubrió que el Pulcova, de 90 millas, tenía su propia luna de unas 9 millas de ancho.
En 2001 los científicos encontraron a Linus orbitando a Kalliope, asi como otra luna alrededor del asteroide Sylvia.Se han confirmado hasta la fecha alrededor de dos docenas de asteroides binarios en el cinturón principal de asteroides y entre los objetos cercanos a la Tierra, incluyendo algunos en los cuales la "luna" está muy cerca en talla al asteroide "principal". Algunos objetos trans-neptunianos (más allá de la órbita de Neptuno) también se ha visto que son binarios. Parece que la mayoría de las lunas de asteroides son fragmentos de pasadas colisiones. También es posible que algunos asteroides formados por escombros sueltos pasaran suficientemente cerca de un planeta como para que la gravedad tirara de este fragmento y creara el satélite natural (el nombre apropiado para una luna). Los astrónomos utilizaron un radar para observar algunos de las parejas asteroide-luna más cercanas. La mayor parte de los otros se descubrieron en luz visible, usando telescopios terrestres con ópticas adaptativas. Estos sistemas usan espejos deformables controlados por ordenador para compensar los efectos de emborronamiento de la atmósfera terrestre, creando imágenes más definidas. La observación de una luna orbitando a un asteroide permite a los científicos calcular la masa y la densidad del asteroide. Con los ojos de un niño El espacio es un lugar rocoso. Las mayores rocas espaciales son los asteroides. Estos asteroides están hechos de roca y hierro, como los cuatro planetas más próximos a nuestro sol. Son diferentes de los cometas, que están compuestos principalmente por roca y hielo. Los cometas tienen colas. Los asteroides se parecen más a planetas y lunas. Los científicos muchas veces llaman a los asteroides "planetas menores". Algunos asteroides incluso tienen lunas. Cuando la nave Galileo voló cerca del asteroide Ida en 1993, los científicos se sorprendieron al ver que tenía un pequeño compañero. Lo llamaron la pequeña luna Dactyl. La mayoría de los asteroides orbita el Sol entre Marte y Júpiter. Esta zona se llama "Cinturón de Asteroides". Hay millones de asteroides. El mayor de todos ellos es Ceres. Tiene una 600 millas (960 km) de circunferencia. Fue el primer asteroide que se descubrió, probablemente porque era el más fácil de ver. Los asteroides no son fáciles de detectar, porque muchas veces parecen manchas oscuras contra la oscuridad del espacio exterior.